Sabemos que ya estás cansada del dolor, la hinchazón y el aumento de peso descontrolado, y que seguro ha pasado por tu mente «No quiero más retención de líquidos ¿Qué hacer para combatirla?»
Bien. Conocemos el malestar indeseable que genera esta condición y queremos ayudarte ya mismo a arrancarlo de raíz.
La retención de líquidos es una condición que puede afectar nuestras piernas, tobillos, abdomen y hasta las manos.
Conocer las causas subyacentes de esta condición es fundamental para abordarla adecuadamente.
En este post, exploraremos qué es la retención de líquidos, cómo se origina y los tratamientos disponibles para combatirla.
Además, te daremos algunos consejos prácticos para prevenirla. Así que, para entender mejor este problema y encontrar soluciones efectivas, acompáñanos y descubre cómo mantener un equilibrio saludable en tu cuerpo.
¿Qué es la retención de líquidos?
La retención de líquidos es una condición común que se caracteriza por la acumulación excesiva de líquidos en los tejidos del cuerpo. Esto puede causar hinchazón y malestar, especialmente en áreas como las piernas, los tobillos, el abdomen y las manos.
La retención de líquidos puede afectar a personas de todas las edades y géneros, y a menudo está relacionada con factores como la dieta, el estilo de vida sedentario, los cambios hormonales y ciertas condiciones médicas.
Cuando el equilibrio normal entre la entrada y salida de líquidos en el cuerpo se ve alterado, se produce un desajuste y se acumula líquido en los tejidos.
La retención de líquidos no solo puede resultar incómoda y afectar la apariencia física, sino que también puede generar molestias adicionales, como sensación de pesadez, rigidez en las articulaciones y dificultad para moverse con comodidad.
La retención de líquidos y sus causas
A la hora de preguntarnos «Tengo retención de líquidos, ¿qué hacer?», una de las primeras cosas que nos salta a la mente es «¿Por qué retengo líquidos?».
Pues bien, las causas de esta condición pueden ser diversas y es importante identificarlas para poder abordarla adecuadamente. A continuación, te contamos cuáles son las más comunes:
- Desequilibrios hormonales: Los cambios en los niveles hormonales, especialmente durante el ciclo menstrual, el embarazo o la menopausia, pueden contribuir a la retención de líquidos.
- Dieta alta en sodio: Consumir alimentos con alto contenido de sodio puede provocar que el cuerpo retenga líquidos. Los alimentos procesados y los condimentos ricos en sal son ejemplos comunes.
- Estilo de vida sedentario: La falta de actividad física y el pasar mucho tiempo en una misma posición pueden dificultar el adecuado flujo de líquidos en el cuerpo, lo que favorece la retención.
- Problemas circulatorios: Las condiciones que afectan la circulación sanguínea, como las venas varicosas o la insuficiencia venosa, pueden interferir en el drenaje adecuado de los líquidos.
- Trastornos renales o cardíacos: Las enfermedades renales o cardíacas pueden afectar la función de filtración y eliminación de líquidos, lo que puede conducir a su acumulación en el cuerpo.
- Medicamentos: Algunos medicamentos, como los corticosteroides, los antiinflamatorios no esteroides (AINE) o los antidepresivos, pueden causar retención de líquidos como efecto secundario.
Retención de líquidos ¿Qué Hacer para Combatirla?
Cuando se trata de combatir la retención de líquidos, existen varios tratamientos efectivos que te ayudarán a aliviar la hinchazón y promover el drenaje de líquidos acumulados en tu organismo.
A continuación, te contamos cuáles son, qué resultados puedes esperar y si son adecuados para ti:
Cavitación: Reducción de medidas y mejora de la circulación
La cavitación es un tratamiento no invasivo que utiliza ondas ultrasónicas de baja frecuencia para romper las células grasas y estimular la eliminación de líquidos retenidos, especialmente si padeces de retención de líquidos en abdomen.
Además de ayudar a reducir la retención de líquidos, la cavitación favorece la pérdida de peso y mejora la circulación.
Los resultados suelen ser visibles después de la tercera sesión, y no necesitas de tiempo de recuperación, así que puedes continuar tu rutina diaria con normalidad.
Sin embargo, la cavitación está contraindicada en casos de embarazo, lactancia, enfermedades renales, si tienes marcapasos, prótesis o hipercolesterolemia.
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Maderoterapia: Técnica natural y remodelación corporal
La maderoterapia es una técnica que utiliza instrumentos de madera diseñados específicamente para realizar masajes y estimular la circulación linfática.
Al poder utilizar instrumentos de diversos tamaños, pueden tratarse áreas pequeñas muy específicas, así que si sufres de retención de líquidos en los pies, esta técnica es perfecta.
Al mejorar el flujo sanguíneo y linfático, la maderoterapia ayuda a eliminar líquidos acumulados y, por lo tanto, a reducir las molestias ocasionadas por la retención de líquidos.
Además, esta terapia es excelente para remodelación corporal, mejorar la apariencia de la piel y combatir la celulitis.
Los resultados pueden ser apreciados desde la primera sesión. No se requiere tiempo de recuperación, pero sí que es necesario mantener una dieta equilibrada y baja en azúcares, así como beber abundante agua para drenar los líquidos y la grasa residual de tu cuerpo.
La maderoterapia no se recomienda en casos de enfermedades de la piel, problemas circulatorios graves o heridas abiertas. Descubre más acerca del tratamiento de maderoterapia en Sevilla.
Presoterapia: Estimulación linfática y alivio de la retención
En la presoterapia utilizamos un equipo especializado para aplicar presión de manera controlada en diferentes áreas del cuerpo, estimulando así la circulación linfática y ayudando a eliminar líquidos retenidos.
El equipo utilizado es perfecto para tratar áreas de gran tamaño, pues es una especie de traje. Esto lo convierte en una excelente alternativa para aliviar la retención de líquidos en piernas.
Además de combatir la retención de líquidos, la presoterapia alivia la sensación de pesadez en las piernas, mejora la circulación y contribuye a la desintoxicación del organismo.
Este tratamiento es especialmente beneficioso para personas que padecen edemas, piernas cansadas o problemas circulatorios.
Los resultados de la presoterapia suelen ser visibles desde las primeras sesiones y no se requiere un tiempo de recuperación, así que no debes preocuparte por poner en pausa tus actividades diarias.
Sin embargo, la presoterapia no se recomienda en casos de trombosis venosa profunda, dolor o entumecimiento que no haya sido previamente valorado por un médico; infecciones en la piel, enfermedad cardíaca inestable o insuficiencia cardíaca congestiva no controlada.
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Consejos para prevenir la retención de líquidos
Dieta y alimentos recomendados
Una alimentación equilibrada es clave para prevenir la retención de líquidos.
Se recomienda reducir el consumo de sal y alimentos procesados, e incorporar alimentos ricos en potasio, como plátanos, aguacates y espinacas, que ayudan a regular los niveles de líquidos en el cuerpo.
Asimismo, es importante mantenerte hidratada bebiendo suficiente agua a lo largo del día.
Ejercicios y actividades para reducir la retención de líquidos
La actividad física regular es fundamental para estimular la circulación y evitar la retención de líquidos. Realizar ejercicios aeróbicos como caminar, correr, nadar o montar en bicicleta ayuda a activar el sistema linfático y promover la eliminación de líquidos.
Además, se recomienda evitar estar mucho tiempo en una misma posición, levantarse y moverse cada cierto tiempo si se pasa mucho tiempo sentado o de pie.
Recetas de infusiones diuréticas
Las infusiones diuréticas pueden ser una excelente opción para evitar la retención de líquidos de forma natural.
Algunas hierbas y plantas con propiedades diuréticas son el té verde, la cola de caballo, el diente de león y el perejil.
Preparar infusiones con estas hierbas y consumirlas a lo largo del día puede ayudar a estimular la eliminación de líquidos y reducir la hinchazón.
La retención de líquidos puede ser un problema incómodo, pero existen diferentes tratamientos y medidas que pueden ayudar a combatirla.
La cavitación, la maderoterapia y la presoterapia son opciones efectivas para combatirla y mejorar la circulación.
Además, seguir una alimentación equilibrada, realizar ejercicio regularmente y optar por infusiones diuréticas puede contribuir a prevenir este problema. Recuerda consultar con profesionales de confianza para recibir una evaluación personal.
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