
Seguro que más de una vez has soñado con levantarte, peinarte en dos minutos y salir de casa con el pelo perfecto. Y es que cuando la melena está rebelde o con frizz, ninguna plancha ni sérum parecen suficientes.
Existen diferentes tipos de alisado que pueden ayudarte a conseguir un cabello mucho más manejable, brillante y suave, sin tener que luchar cada mañana con el encrespamiento.
¿La clave? Conocer bien cómo funciona cada uno y cuál puede adaptarse mejor a lo que tu pelo necesita.
Tips Rápidos para Conocer los Distintos Tipos de Alisado
Puede que escuches hablar de alisados y pienses que todos hacen lo mismo, pero la realidad es que no. Cada técnica trabaja de una forma distinta sobre la fibra capilar y por eso los resultados también cambian.
Factores que influyen en el resultado
El estado de tu pelo es clave. No es lo mismo un cabello teñido y frágil que una melena fuerte y natural.
También influye cuánto encrespamiento tienes, si buscas un liso total o solo controlar el volumen. Por eso dos personas pueden hacerse el mismo tratamiento y notar efectos diferentes.
La importancia de elegir según tu tipo de cabello
Elegir bien tu alisado no es simplemente cuestión de gustos, es la diferencia entre un resultado bonito y uno que da problemas.
Hay cabellos que agradecen más los alisados orgánicos como la enzimoterapia, la taninoplastia o la nanoplastia, porque son más suaves y respetuosos.
En cambio, otros que buscan un liso muy marcado que se mantenga por meses, pueden optar por la keratina. Lo importante es pensar en lo que quieres conseguir y en lo que tu pelo puede aguantar sin dañarse.

¿Qué Tipos de Alisados son Más Seguros y Duraderos?
Después de ver que no todos los cabellos reaccionan igual, toca entrar en detalle. Cada alisado tiene su forma de actuar y también ciertas diferencias, así que vamos a ver qué puedes esperar de cada uno.
Enzimoterapia
Si lo que quieres es domar el frizz sin castigar el pelo, la enzimoterapia en Sevilla puede ser tu aliada.
Trabaja con enzimas naturales que relajan la fibra capilar y el resultado no es solo que el cabello quede más dócil: también gana brillo y se siente más ligero al tacto.
No es un liso rígido, sino un efecto más natural, conservando su movimiento. Además, al no usar químicos agresivos, también es segura si llevas tintes o mechas.
Taninoplastia
La taninoplastia funciona a base de taninos, compuestos de origen vegetal que ayudan a reestructurar la fibra del cabello.
Lo que notas después es que el encrespamiento se controla mucho mejor.
El acabado suele ser un liso suave, con movimiento, que no aplasta la melena. Es ideal si lo que te molesta no es tanto el volumen, sino ese frizz que parece imposible de controlar, sobre todo en días de humedad.
Nanoplastia
La nanoplastia es de los tipos de alisado más completos porque combina un alisado potente con un tratamiento reparador.
Sus aminoácidos y nanopartículas penetran en profundidad, por lo que además de disciplinar el cabello, lo nutre desde dentro.
Es la alternativa perfecta si tu pelo está dañado por tintes, planchas o decoloraciones, ya que ayuda a recuperar fuerza y suavidad. Después del tratamiento, lo normal es notar un liso más marcado que con otros métodos y una melena mucho más manejable.
Keratina
La keratina en Sevilla es seguramente la más conocida y no es casualidad.
Este tratamiento funciona rellenando la fibra capilar y sellando la cutícula, lo que hace que el frizz desaparezca, el pelo se vea más brillante y el peinado dure mucho más.
Su duración suele estar entre 3 y 6 meses, dependiendo de tu tipo de pelo y cómo lo cuides. Lo bueno es que, además de alisar, también aporta suavidad, por lo que peinarse cada mañana se vuelve mucho más fácil.

¿Cómo Elegir el Alisado Ideal para tu Cabello?
Saber qué tipo de alisado hacerte no siempre es sencillo, sobre todo porque todos prometen menos frizz y más brillo. La clave está en fijarte en cómo es tu pelo y qué resultado quieres conseguir.
Si tu melena está sana y lo que quieres es mantener la fibra lo más cuidada posible, tratamientos como la enzimoterapia o la taninoplastia pueden encajarte mejor. Son más respetuosos y dejan un acabado natural, manteniendo el movimiento.
En cambio, si tu cabello está castigado por tintes o decoloraciones y además es rebelde, la nanoplastia puede darte el plus de nutrición y fuerza que necesita.
Por último, si lo que buscas es un liso impecable y duradero, la keratina sigue siendo una apuesta segura.
Lo importante es no elegir “porque sí”, sino pensar en lo que tu melena necesita ahora mismo. Así te aseguras de disfrutar de un resultado bonito y de que el alisado dure lo máximo posible.
Y si aún tienes dudas sobre qué opción puede ir mejor con tu pelo, lo más fácil es preguntarnos. En nuestra Peluquería en Sevilla estaremos encantadas de orientarte para que elijas el tratamiento que realmente te haga olvidarte del frizz y ayudarte a sentirte cómoda con tu melena.

